Entras solo al palacio y lo encuentras vacio. Atraviesas varios salones y un momento después, en una de las salas ves una pareja abrazada y besándose en silencio. No sabes como acabará aquello.
Estás solo y los contemplas, entras sin quererlo en su círculo de intimidad. Se mueven delicadamente transitando por diferentes posturas. Tienes la sensación de reconocer esas figuras, de un deja vu de cada pose: enroscados, abrazados frontalmente, de pié, cogidos de las manos, uno encima del otro, etc.
Hace unos días escribía una entrada sobre una exposición titulada Cosas que solo un artista puede hacer. Una performance con peces de colores volando en jet privado.
Comparémosla con ésta otra que consistió en proyectar la imagen de Orlando Zapata Tamayo en la fachada del edificio de la Misión Cubana en Nueva York. Comparémos el compromiso, el riesgo, la eficacia, la intensidad y el coste de la propuesta. Yo diría incluso que es bella.
Art Protest en Nueva York bajo el título Nemesis del artista cubano Geandy Pavón
Todavia quédan otros presos en Cuba en huelga de hambre. Guillermo Fariñas es uno de ellos y comenzó una huelga de hambre el pasado 24 de febrero, en protesta por la muerte de Orlando Zapata Tamayo y demanda que el régimen de los hermanos Castro ponga en libertad a 26 prisioneros de conciencia cuyo estado de salud puede convertirlos “en otros Zapata”.
Demanda tu también que el régimen de los hermanos Castro ponga en libertad a 26 prisioneros firmando aquí. En este momento hay ya 23.000 firmas. Algunos intelectuales y artistas como Rosa Montero, Almodóvar, Ana Belén, Miquel Buesa ya han firmado y les honra. En este momento hay 26 presos políticos en Cuba que pueden acabar como Orlando. Creo que vale la pena que su sacrificio sirva para algo.
Hace 30 años oí hablar por primera vez del Cuadrado blanco sobre fondo blanco de Malevich. Yo imaginaba un lienzo en blanco o bien un lienzo pintado uniformemente y en toda su extensión de blanco sin matices, totalmente plano. Solo años después supe que realmente era posible distinguir ese cuadrado sobre su fondo gracias a una sutil diferencia del tono de ambos. El que realmente pintó Malevich era todavía pintura. El cuadro que yo imaginaba era un puro título y el lienzo en blanco una simple excusa, para el comienzo del arte conceptual. Lo que tiene el arte conceptual es que no es necesario pintar el cuadro basta solo con imaginarlo o contarlo y ya está operando como tal. A veces es incluso preferible solo imaginarlo. ¿Quién podría pintar un cuadrado blanco sobre fondo blanco mas perfecto y blanco que el que imaginamos?
El Cuadrado negro sobre fondo blanco de 1913 (izquierda) que conduce a Kazimir Malevich, casi inevitablemente, al Cuadrado blanco sobre fondo blanco de1918 (derecha). Ambos cuadros en su sucesión son metáfora exquisita del camino cortado que representa el arte ingenioso contemporáneo.
Arquitecto Superior por la
Escuela de Arquitectura de Madrid
Master en Project Management
por el Centro Superior de Arquitectura
Interiorista y Diseñador industrial